jueves, 27 de enero de 2011

Perspectivas de un año electoral

2011, año ansiado y esperado con mucha impaciencia por los políticos de siempre. Ven ellos una nueva oportunidad de afianzarse en el poder y algunos otros, de llegar a las mieles del poder que es como un elixir sin el cual, una vez lo prueban, no lo pueden ni lo quieren dejar.

Inicia nuestro año con un recrudecimiento de la violencia. Ante ello es ridículo que el señor Presidente de la República nos diga que su "administración" (y no Gobierno, el Gobierno es del Estado de Guatemala, no de una persona) ha tenido grandes avances en materia de seguridad. ¡Vaya cuento! Sólo él y sus asesores de imagen y comunicación (entre ellos el periodista que funge como Ministro de Gobernación) se lo creen. Baste con salir a la calle y los creyentes encomendarse al Creador para regresar sin novedades a sus hogares. También pláticas familiares, de amigos o de compañeros de trabajo, entre los temas siempre dirán "...asaltaron a fulano...", "...me robaron mi celular...", "...vi cuando asaltaban a alguien...", "...mataron a una persona por mi casa...", "...hoy mataron a otro chofer de bus...". Realmente los niveles de delincuencia e inseguridad descollan como nunca antes los habíamos visto.

Mi proemio lo hago por lo siguiente: el tema central y primordial de muchas campañas proselitistas será la seguridad. Lamentablemente los gobernantes se olvidan que sus obligaciones principales son brindarle a las personas justicia y seguridad. Justicia, porque si hay certeza del castigo a los delincuentes, los niveles de inseguridad disminuirían. Veremos cuánto tiempo más nos queda esperar a que alguna administración comprenda esto y lo lleve a la práctica. Sólo así saldremos de la inseguridad que nos agobia y nos mata silenciosamente.

En lo que respecta al tema económico y financiero de cada persona, el panorama no parece alentador. Si bien es cierto la situación económica a nivel mundial puede influir sobre nosotros, el mismo Presidente nos dice que "si no se hace una reforma fiscal, al que siga le tocará vivir un infierno". Lamentablemente siempre reforma fiscal se refiere únicamente a aumentar impuestos que cargan a los cada vez menos que los pagamos. Y de verdad que da cólera y coraje ver que lo que pagamos se gasta en cosas que no nos benefician en nada. Campañas políticas, regalar artilugios a quienes en verdad no lo necesitan, obras anómalas, desvío de dinero, corrupción, corrupción, corrupción. Estamos perdidos. Y también el nivel de endeudamiento, ha crecido a niveles nunca antes visto. Nos están llevando camino a la ruina (ojo Grecia, Irlanda; parece que vamos en la misma dirección).

Sólo con estos factores creo que es suficiente para hacernos la idea de lo que nos espera con el año electoral. Ello sin tomar en cuenta muchos otros factores que a la postre, nos van a influir como sociedad, como Estado. Las ofertas electorales, de lo más variado. Esperemos el transcurso del tiempo para llegar a la época de campaña política oficial, porque la máxima autoridad electoral ni eso ha podido controlar, la violación de la ley de los políticos al incumplir la ley. Si ahora que son candidatos no respetan las normas jurídicas, imaginémonos que harán cuando lleguen al ejercicio del poder.


Daniel Enrique Ambrosio Zapón

No hay comentarios:

Publicar un comentario